Carta a Egipto
Pues este
post es un extra a toda mi aventura en Egipto, es una forma de expresar todo lo
que viví en una sola carta.
No hay
manera sencilla de describir lo que se siente realmente vivir en otro país muy
diferente al tuyo, una cosa es visitar y otra cosa es literalmente vivir un
país. No fue para nada sencillo, aprendí mucho y a lo largo del tiempo que viví
en Cairo estuve en una relación de amor y odio con Egipto; sin embargo no tengo
más que agradecer a todas las personas que conocí e incluso a las que no pues
fue gracias a todos que viví lo que viví.
Y claro es
muy fácil quejarse de todo lo malo pues siempre es más notorio y escandaloso
todo aquello malo que nos pasa por el simple hecho de que no estamos
acostumbrados a agradecer los pequeños regalos diarios que nos da la vida.
Es cierto,
Egipto tiene sus defectos como cualquier otro país, problemas que, aunque
diferentes, se originan como parte de la experiencia humana que enfrentamos
todos en donde quiera que vivamos.
Pero aun
así, solo me queda agradecer.
Agradecer a
una ciudad que me ofreció una visión distinta del mundo al caminar a diario por
sus calles, esas calles empolvadas, inmersas en un tráfico descontrolado y la
mayoría de las veces llenas de mucha basura, pero que a pesar de eso me
ofrecieron realidades distintas a las de mi país, me ofrecieron muchos siglos
de historia, transeúntes con distinta cultura, cafés en cada esquina, sándwiches
de 3 pesos que siempre quitan el hambre, un lugar para sentarme y tomar un té a
casi cualquier hora, tiendas de ropa en todos lados, farmacias tan frecuentes
como oxxos en México y los mejores jugos naturales recién hechos.
Vivir en un país tan distinto al tuyo
No, para
nada es fácil, nunca va a ser fácil vivir en un país con un idioma distinto al
tuyo, con costumbres distintas, costumbres distintas, y una infinidad de
situaciones desconocidas.
La clave
está en aprender de ti mismo y de los demás, integrarte, conocer a la gente de
primera mano, hablar con ellos, que te conozcan y viceversa, hacer amigos
locales es algo clave.
Los
pequeños placeres de la vida hacen la diferencia, aprender a encontrarlos es fácil solo hay que
abrir los ojos. Comer un sándwich de tomate y vegetales (en Egipto se llama
“em-sa-ah”) por el equivalente a 3 pesos, subirte a un colectivo por otros 3
pesos e ir a casi cualquier lado, darte cuenta que estás en una ciudad
milenaria y mundialmente famosa, visitar las pirámides más emblemáticas de la
humanidad y un largo etc. Hay que encontrarle el lado bueno a la vida.
Amigos que no sabes que existen
Alguna vez
te has preguntado que está haciendo esa persona que aún no conoces? Es una
pregunta super extraña porque no tienes ni la más remota idea de quien es esa
persona, pero cuando conoces a esa persona y de pronto se vuelven amigos es una
sensación maravillosa.
Aprendí
gracias a este viaje a apreciar a las personas y en especial a mi círculo
cercano como jamás lo había hecho. Aprendí a darles un espacio en mi vida, a
extrañar realmente la presencia de aquellas personas cuando ya no están, a
disfrutar cada momento que pasé con ellos.
Gracias a
este viaje conocí a los que ahora puedo considerar hermanos y pues qué más
puedo pedir?
Este post
no va a ser largo, solo me queda decir G R A C I A S E G I P T O, gracias totales.
Gracias por
los momentos increíbles, por esos lugares que me quitaron el aliento, por las
fotos que tomé, por la comida sabrosa, por los miedos que me hiciste enfrentar,
por los hermanos que me regalaste y en general por una de las experiencias más
maravillosas de mi vida.
Te volveré
a ver pronto. اشوفك قريب
Me encantó tu post pues estoy viviendo algo sobre lo que hablas, animarte a conocer a personas diferentes, y de verdad es algo maravilloso. Te mando una abrazo! ;)
ResponderBorrarMe encantó tu post pues estoy viviendo algo sobre lo que hablas, animarte a conocer a personas diferentes, y de verdad es algo maravilloso. Te mando una abrazo! ;)
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