Tour del adiós

Y pues ya estaba claro, me iba de Egipto y no porque tuviera qué sino porque no sentía que pudiera experimentar mucho más de lo que ya había vivido hasta el momento, obviamente siempre puedes vivir muchas más cosas es solo que en mi caso no veía algo relevante como para quedarme.

Y entonces me puse a buscar oportunidades por todos lados, yo quería ir de regreso a Europa pero no estaba necesariamente en mis manos así que solo me quedaba esperar.

Afortunadamente al poco tiempo recibí la notificación de interés por parte de una empresa en Hungría y al poco tiempo otra en Turquía.

Envíe mis documentos aplicando en ambas oportunidades y sólo me quedo ponerme a esperar por lo mejor, al menos ya tenía opciones de salida lo cual me hizo sentir bastante más tranquilo.

Por otro lado, ya solo me quedaba una semana en la empresa. Viajar todos los días en transporte público por 2 horas, ir a aguantar cabroncitos tercos que no querían ver otras opciones y gastarme un buen de dinero en comer fuera todos los días no fue impedimento para sentirme bien por el hecho de que iba a estar desempleado de nuevo (ya me empezaba a gustar el asunto xD)

Pues la semana pasó sin más, sin pena ni gloria, rutinaria pero cada día me daba la sensación de estar más cerca de mis tan ansiadas vacaciones.

Y por fin, el día llegó. Fue el miércoles 16 de Marzo un día antes de mi cumpleaños (se aceptan regalos atrasados) que fui a trabajar a Careem por última vez. Debo decirlo, hasta el momento había sido mi experiencia laboral más divertida porque la gente en general era joven, la empresa como tal estaba de buena manera desorganizada, y tenía libertad para hacer lo que me diera la gana. Yo quise haber logrado mucho en esa empresa pero pues la diferencia de ideas y de culturas definitivamente no me lo permitió.

Me despedí de todos, le di las gracias a la gerente que siempre fue buena onda conmigo aunque a veces ni me pelaba la cabrona pero en fin. Llegué en la noche al departamento con una carga menos.

Fue así que inicio el tour de despedida. Tenía muchos planes para entonces, quería ver lo que me faltaba de Egipto, que técnicamente era solo Alejandría y Luxor, pero dada la falta de fondos estaba seriamente pensando en dejar Luxor para otra ocasión (aunque bien sabía que esta podría ser mi única oportunidad).

Al día siguiente me puse a limpiar el apartamento para la que se supone sería la mejor fiesta que se había hecho en Maadi (la zona en la que vivía), ya para ese entonces las fiestas que había organizado en ese apartamento se habían vuelto algo conocidas al igual que “el mexicano de las fiestas”, así que no podía defraudar y menos en mi cumpleaños.

Me puse a invitar a todos los que pude y a los que quedaban aún en Egipto: amigos extranjeros, del futbol, amigos de amigos, en fin el chiste era hacer una fiesta bastante escandalosa.

Me empecé a preocupar cuando varios me comenzaron a decir que no iban a poder ir, otros me dijeron que iban a llegar tarde y así varios fueron deslindándose de la fiesta, afortunadamente había invitado a tantos que por ley de probabilidades tenían que ir muchos, al menos eso pensaba.

La noche llegó, yo regresé de dar clases y me puse a arreglar los últimos detalles para que la noche fuera de lo mejor. Los primeros en llegar fue Galyna junto con Mustafa (su novio), un amigo de Karim y ya, entonces me preocupaba porque ya era más tarde de lo que yo había pensado en que llegarían.

Como ya había comentado en un post previo, los egipcios tienen esta increíble habilidad de llegar tardísimo y contagiar a los demás con ese hábito. Yo había avisado que la fiesta era a las 9 para que todos llegaran como a las 11 pero dando las 11:30 no había rastros de nadie.

Entonces me puse a llamarle a todos y algunos ya venían en camino, afortunadamente no hubo de que preocuparme, como al cuarto para las 12 empezó a llegar medio mundo. El depa se llenó rápidamente y la fiesta empezó.

El único problema y con lo que habíamos batallado en las últimas fiestas era la cantidad de hombres y eso era algo que no me gustaba xD. Así que invité a tantas mujeres pude y les pedí que no trajeran amigos; sin embargo al principio de la fiesta habían solo un par de mujeres y estaba esperando a que mejorara el asunto. Hasta que llegó Bárbara, una de las brasileñas de la primera generación de intercambistas que llegó en diciembre, ella aún no se había ido de Egipto.

Con ella llegaron otro par de brasileñas, una española un dj y mucha más diversión. La fiesta fue un éxito en todo sentido. Conocí más gente, todos se divirtieron, bailamos mucho, nos divertimos y lo mejor de todo fue cuando me cantaron “happy birthday” en varios idiomas, esa es un recuerdo que tendré por mucho tiempo, fue genial sentirme rodeado de tan geniales personas en mi cumpleaños.

Al día siguiente estaba muerto, pero de muy buen humor por la fiesta del día anterior, aparte ya no tenía que preocuparme por trabajo pues estaba desempleado.

Desafortunadamente ese fin de semana me enteré que me habían rechazado los procesos en Hungría y en Turquía. Estaba estancado de nuevo.

De inmediato me puse a buscar oportunidades por todos lados, me tardé un par de semanas en encontrar una oportunidad nueva. Yo ya me había despedido de medio mundo y me daba miedo que fuera en vano.

Ya casi al finalizar Marzo, me aceptaron en otro trabajo (más adelante sabrán el país). Así que lo único que me quedaba era resolver el problema de la visa. Fui a la embajada y me dijeron que se iban a tardar más o menos una semana en resolver el asunto pues tenían que llamar a México para comprobar que todo el asunto estuviera en orden.

Esa semana fue bastante tensa para mí pues dependía de lo que me dijeran si me quedaba en Cairo otro rato más o por fin me iba.

Por otro lado, las fiestas seguían pues una de las chicas brasileñas se iba y quería hacer fiesta en la casa. Seguía disfrutando a mis amigos pues no sabía si los volvería a ver pronto. Y de hecho fue uno de los mejores meses porque me di cuenta de lo importante que se vuelve disfrutar de las cosas cuando sabes que pronto van a terminar.

Se terminó Marzo, y empezando Abril me dieron la buena nueva. Fui a la embajada y me dieron la visa!!! Ese día fue un parteaguas porque ya no había nada que me detuviera, me iría de Egipto en un par de semanas.

Lo primero que hice tan pronto recibí la visa fue avisarle a todos mis amigos, estaba hecho. Me iba de Egipto.

Llegué a la casa, compré mis boletos de avión y comencé a planear mi último par de semanas en Egipto. Desgraciadamente no tenía dinero para viajar dentro de Egipto mucho más por falta de dinero así que decidí que haría viajes cortos.

Y que quedaba? Pues organizar la última fiesta, la definitiva.

Así lo hice, hice una fiesta con todos los que quedaban, no fue grande ni escandalosa pero fue bastante divertida. Y al día siguiente de la fiesta me fui con unos amigos a “El Sokhna” unas playas bastante bonitas pero un poco peligrosas. Fue ahí que viví la experiencia más aterradora que he vivido en Egipto y una de las peores en mi vida, mi viaje se comprometió bastante…